ANCHOA, tomado, seguramente por conducto del catalán, del genov. anciöa, y éste del lat. vg. *AP?ÚA, procedente del gr. ęưύƓ íd.

1.ª doc.: anchova, Nebr.; anchoa, González del Castillo († 1800).

La υ griega, sonido ajeno al latín, intermedio entre i y u, fué imitado en latín vulgar por las combinaciones UI o IU (comp. ƔǢρος > *GIURUS > rum. jur), luego no es sorprendente que ęưύƓ fuese transcrito por *AP?ÚA; a una forma como ésta parece referirse la grafía apyia que M-L., REW 520, cita del CGL III, 256.66. Como las varias formas romances no pueden explicarse por la evolución de cada idioma, tendrán que proceder de un centro romance de irradiación común: it. acciuga, sic. anciova, prov. anchoio, fr. anchois [1546], cat. anxova1, port. y gall. anchova, Sarm. (CaG. 208r yvyp. 198), en cuyo tiempo parece que ancho(v)a era poco conocido y se empleaba más enchuga como castellano. De ahí según Cornide (1757) el gall. xouba (j-), que sería lo mismo2. Sólo en Sicilia, Génova y Provenza es regular la evolución P? > ch, y Sicilia está descartada porque allí la U latina da u. Teniendo en cuenta el cat. amploia, rosell. y Niza amplova ‘especie de. anchoa’, y la explicación etimológica de Plinio, según la cual la aphye se engendraría del agua del mar en contacto con la lluvia (gr. ęπò ‘de’ y Ǫειν ‘llover’), podría pensarse en aceptar la hipótesis de que aphye se cambió en *appluvia por etimología popular, como sugiere Skok, ZRPh. L (1930), 5233; entonces el centro de difusión de la forma ancho(v)a podría ser el cast. o el portugués, como se ha dicho repetidamente; pero es improbable que el vocablo se haya difundido desde un foco tan excéntrico como el último o desde una lengua como el castellano, cuyo contacto con el Mediterráneo es tardío; además, como resultado de *appluvia se esperaría *anchuv(i)a y no anchova. En resolución, lo más probable es que *AP?ÚA diera en Génova anciöa (forma documentada, en efecto) y que éste sea el punto de partida; al pasar del genovés al provenzal o catalán se cambiaría ci en pl, teniendo en cuenta que PLUMBUM da en Génova ciongio, PLATTA ciatta, PLANGĔRE cianze (Casaccia), de donde las formas amplova, amploia; mientras que anchoa y demás congéneres se tomarían sin alteración del consonantismo. En castellano la forma anchova, aunque poco conocida, parece ser la del uso general hasta el S. XVIII. El vasco antxu es forma muy secundaria de la cual no puede salir el neerl. ansjovis, al. anschovis [1653], contra lo que afirma el diccionario etimológico alemán de Kluge: estas formas, como muestra la -v- han de salir de la catalana o la portuguesa.

DERIV.

Anchoar.

1 Ensayo para una historia de los peces... de Galicia, p. 99; ya recogido por Sarm. CaG. 80r, 85r, 114v, A15v, A16v.―

2 «La pesquera de l’anxova e sardina que’s fa a Tavallera» en la costa Norte del Cabo de Creus, doc. de 1484 (copia de 1558), p. p. F. Rahola, Mem. Ac. B. Letras VIII, 1904, 482.―

3 Análogamente ya KƉepinsky, RRQ 1918, 96-99, y Ƈasopis pro Moderní Filologii V, 243ss. Parte de una forma latina aplua que figura en Nebr. Pero M. Roques, Rom. XLVI, 449, observa que esta forma, que no se halla en ningún texto latino, es seguramente una errata.