AMBIENTE, tomado del lat. ambĭens, -ntis, ‘que rodea’, participio activo del verbo ambīre ‘rodear, cercar’, ‘pretender’, y éste derivado de īre ‘ir’.

1.ª doc.: 1588, Virués.

Para la historia de la idea expresada por ambiente, vid. Spitzer, Milieu and Ambiance, en «Philosophy and Phenomenological Research», III, 1-42. Para la historia de este cultismo, vid. Karl Michaëlsson, Studia Neophilologica XII, 91-119. Hay también artículo de Migliorini, del cual se publicará reedición en sus Scritti Linguistici (1936).

DERIV.

de ambire: Ámbito [ámbitu, 1557: Villalón; ámbito, 1617: Suárez de Figueroa]1, tomado del lat. ambĭtus, -ūs, íd. Ambición [ambicio, Alex.; ambición, Santillana]2, tomado del lat. ambĭtĭo, -ōnis, íd. Ambicionar. Ambicioso [Pérez de Guzmán, † h. 1460; Cuervo, Dicc. I, 414-5], tomado del lat. ambitiosus.

1 También Paravicino, † 1633: RFE XXIV, 313.―

2 Todavía Juan de Valdés considera que es latinismo que debiera introducirse (ed. Montesinos, p. LXI). J. Ruiz empleó ambicia.