ALTAMANDRIA, ‘centinodia (especie de correhuela, Polygonum aviculare)’ origen incierto.
Según un colaborador de la Acad. sería el ár.
ƫú⺆ma ƫaȳrîya ‘alimento de pájaros’ (
ƫú⺆ma ‘alimento’, y
ƫaȳrî adj. ‘perteneciente a las aves’, Freytag III, 84
a); desde el punto de vista fonético esto ni es fácil ni imposible: espontáneamente pudo dar
*altomatería,
*altomantría, lo demás hubiera debido hacerlo una etimología popular. Semánticamente la etimología es posible si, como afirma la Acad. (s. v.
centinodia), la semilla de esta planta es muy apetecida por los pájaros; aunque los nombres populares reunidos por Colmeiro parecen indicar que la relación que el pueblo ve con los pájaros es más bien de otra naturaleza, quizá un parecido de forma:
lengua de pájaro,
pico de gorrión,
hierba de la golondrina, gall.
pé de páxaro,
lengua d’ovella, val.
llengua de pardalet. De todos modos faltan noticias de que
ƫú⺆ma ƫaȳrîya sea nombre de planta en árabe (nada parecido en el glosario de Asín, s. v.
polygonum ni s. v.
ƫú⺆ma o
ƫáȳr), y por lo tanto hay que considerar esta etimología como muy dudosa. Por otra parte la milenrama, también llamada
altarreina, llevaba en mozárabe el mismo nombre
cabotaira que el Polygonum aviculare (Asín, p. 50), y aunque se trata de plantas pertenecientes a familias diferentes (poligonácea ésta, y compuesta aquélla) esto significa que se vió entre ellas alguna relación, y todos modos faltan noticias de que
ƫú⺆ma ƫaȳrîya tituyendo humorísticamente
reina por
mandria; según García de la Leña la altamandria se llama
sanguinaria basta, seguramente por lo nudoso de sus tallos (de aquí el nombre
centinodia, cat.
herba de cent nusos): se consideraría que una planta tan basta no merecía el nombre de
reina, sino el opuesto
2.
En cuanto a altarreina (ya 1742: Fernández y Navarrete, en Colmeiro, III, 182), como lleva también el nombre artemisa real, debe venir de altamisa, sustituyéndose -misa, desprovisto de significado, por el sustantivo reina, sugerido por real.