ALMOTACÉN, ‘inspector de pesas y medidas’, del hispanoárabe muɅtasáb íd. (ár. múɅtasib participio activo de la 8.a forma de Ʌ-s-b ‘contar’).
1.ª doc.: almutaceb, 1202, F. de Madrid; almotaçén, 1219, F. de Guadalajara.
Dozy,
Gloss., 177; Neuvonen, 93-94. También port.
almotacé,
almotacel, cat.
mostassà1, cat. ant.
almudafàs. Las variantes de este vocablo en castellano son numerosísimas, vid. Neuvonen y
DHist., s
. v.
almotazafe,
almotazán,
almutacén,
almutazaf,
almutazafe,
almudazaf,
amozatén. Para el zamorano Dr. Villalobos (1.ª mitad del S. XVI),
almutacén no era todavía palabra de uso general en castellano, sino uno de los términos moriscos como
albacea, «con que los toledanos ensucian la polideza de la lengua castellana». PAlc. da para el hispanoárabe la acentuación
muhtecéb.
DERIV.
Almotacenazgo. Almotacenía.
1 Forma que se explica sin duda por una variante intermedia *moftassà (comp. matalaf > matalàs). ↩