ALMODROTE, ‘salsa compuesta de aceite, ajos, queso y otros ingredientes’, palabra mozárabe quizá resultante de una alteración del lat. MORTUM íd. por cruce con el ár. madrûs ‘machacado, desmenuzado’; pero más bien parece ser un mozár. *moƫról, *moƫród, equivalente del sinónimo cast. morteruelo.

1.ª doc.: h. 1400, Glos. de Toledo y del Escorial.

Desde el tiempo de Nebr. y Covarr. se viene repitiendo que almodrote viene del lat. MORETUM, pero sin explicar la evolución fonética, y Simonet se abstuvo igualmente de hacerlo. Empecemos por citar algunos testimonios romances. Los glosarios de 1400 traducen «aletilium», en el que Castro vió con razón una corrupción de allium et oleum, cast. ajiaceite, cat. allioli. Nebr.: «almodrote de ajos e queso: moretum». Covarr. a la definición citada arriba agrega: «para majar el almodrote bien, y mezclar todo lo que lleva, se va despegando, y rayendo de las paredes del mortero, y juntándose en el hondo para poderse machacar». Los testimonios de autores aducidos por el DHist. concuerdan con estos datos semánticos. Por otra parte existió cat. ant. almadroc, potaje en el que entraban ajo y queso, ya documentado en dos textos del S. XV (Alcover), y debe tenerse en cuenta la variante oída por Alcalá Venceslada en Huelva: almorraque «manjar compuesto de aceite, vinagre, sal y cebolletas, pimientos y tomates picados». Compárese con esto la descripción del MORETUM, que Forcellini deduce de los autores latinos: «genus cibi... allio, apio, ruta, coriandro, bulbo, caseo, oleo, aceto... sectis, et pistillo operose tritis, minutis, coactisque in mortario... conficitur»; y no se dudará de que en la Bética, de tan honda tradición latina, pudo conservarse el nombre de este manjar descrito por Ovidio y cantado en un poema especial que se atribuye a Virgilio. La forma de Huelva sería entonces la más fácil de explicar, pues el cambio de *moret en *morrat, morrac puede justificarse en la fonética del hispanoárabe; pero en las demás formas hubo de actuar la inducción de otro vocablo. Como el cat. almadroc tiene exactamente la forma de un participio pasivo árabe, pudo ser la de una palabra que significara ‘machacado’ y ésta sería madrûs, el participio de dáras, que R. Martí y el glosario de Leyden traducen «terere» y que PAlc. define «majar con maça o maço, majar con majadero, moler, quebrar desmenuzando»1. Asín, Al-And. IX, 20: «quizá del ár. muȓárriƫ ‘pedorrero’, participio activo de ȓrƫ ‘peer’, por el efecto que acostumbra a producir la salsa de almodrote». A él dejo la responsabilidad de este dato; si es dato cierto, aunque muȓárriƫ no se puede admitir como étimo por razones fonéticas, sí podría suponerse que *moret (MORETUM) se cambió en hispanoárabe en maȓƫ ‘peído’ (> almodrote) por efecto de esta etimología popular. Sin embargo hay otra solución algo más sencilla y que me parece más verosímil. Nebr. traduce con moretum el cast. «morteruelo, especie de salsa» y el morterol está descrito en el Libro de Cocina catalán del S. XIV2; morteruelo figura ya traducido por tucetum ‘picadillo’ en los Glos. de Toledo y del Escorial, y E. de Villena dice que el hígado de puerco se guisa «picado en morteruelo e en otros adobos» (V. el libro de Castro, y comp. Oudin, Covarr. y Aut.). El equivalente mozárabe de morteruelo debió ser *morƫról y con una doble disimilación *motród, que fácilmente pasaría a almodrote; comp. dalîl > adalid, MONASTERIUM > Almonacir > Almonacil > Almonacid, y en sentido contrario rabád > arrabal y análogos3. Nótese que al fin y al cabo la semejanza relativa de MORTUM con almodrote no es del todo casual, pues los latinistas creen que aquella voz latina y MORTARIUM derivan de un radical común (vid. Walde-H.).

1 También podría pensarse en madqûq, que significa lo mismo en Marruecos y Egipto (Lerchundi, Bocthor), pero no lo hallo documentado en España. En cuanto a la palabra que significaba ‘almodrote’ según PAlc., a saber muȶáwwama (derivado de ȶáȬma ‘ajo’), podría explicarnos la d de almodrote, pero no el cambio de la vocal tónica E en O. Del cruce de *almodroque con otra palabra viene acaso ciquitroque [1786], que Terr. define ‘guisado de tomates, pimienta, calabaza, que en algunas partes llaman fandango y en otras pisto’.―

2 Por desgracia no copié la descripción completa, pero ha de ser algo análogo: «si vols fer bon brou de moltó, e de gallines aprés, ages cuxes de moltó mal cuytes, e capolades menut del magre...», Bol. de la Soc. Castellon. de Cult. XVI, 177.―

3 Es decir, pudo haber primero el paso espontáneo de motrol a motror (comp. los casos numerosísimos de este cambio en voces arábigas que reuní en BDC XXIV, 76), y luego disimilación motrod; o bien ultracorrección de la tendencia bien conocida a cambiar -d en -l. Intervendría también el influjo del sufijo -ote. Para almorraque, comp. el cambio de sufijo en alfazaque y alizaque.