ALMOCREBE, ant., ‘arriero’, origen incierto, del antiguo almoquéver y éste probablemente metátesis del ár. murákkib ‘el que hace montar a otro en una caballería’, participio activo de la 2.a forma del ár. rákab ‘montar’.

1.ª doc.: 1585, López Tamarid.

Ya al publicarse Aut. era voz anticuada, y nunca se emplearía mucho en España, pues sólo figura como vocablo vivo en un proverbio citado por el leonés Correas1. Para López Tamarid era el «harriero de mulas o recuero». La palabra ha sido siempre muy viva en portugués y allá debemos acudir para su significado exacto. Almocreve es ‘el que tiene por oficio conducir bestias de carga’, ‘recuero’, ‘cargador’ (Fig.), y CortesƟo cita en documentos medievales las formas almoquéver y almoquéveres, con el derivado almoquevaría2. Para la etimología, como el almocrebe es un ‘recuero’, según definen independientemente Tamarid, Viterbo y Figuereido, me parece prudente buscar un derivado arábigo de la misma raíz que ha dado recua, port. récova, el hispanoár. rakûb ‘caballería’, ‘caravana’, ár. rákb íd. Como rákkab, 2.a forma del verbo correspondiente, es ‘hacer cabalgar a otro’ (Dozy, Suppl. I. 551b; Freytag, II, 184a), y es vocablo vulgar empleado en las Mil y una Noches y en el Riyad an-Nofús de Cairuán, es sumamente probable que su participio murákkib, vulgarmente murékkib, corriera en España en el sentido de ‘alquilador de caballerías’ y después ‘arriero’ en general. Ni la metátesis *almoréqueves > almoquéveres, ni la posterior en almocreves (ya en Gil Vicente, farsa de este título) presentan dificultad (comp. port. ant. almogáraves, almograves por almogávares). La etimología que hasta ahora unánimemente se ha aceptado (Engelmann en Dozy, Gloss., 169; Eguílaz, 231; Nascentes), ár. mukârī ‘alquilador’, participio activo de la 4.a forma de kárà ‘alquilar’, es imposible fonéticamente, puesto que no explica la consonante labial, y no satisface desde el punto de vista semántico, pues igual podía aplicarse al propietario de una casa o a un ropavejero.

1 Este autor explica la palabra diciendo que es «el corredor», lo cual deberá entenderse en el sentido definido por Aut. ‘el que procura la venta de caballerías’. Para Correas ya sería voz muerta, de sentido vagamente sabido y sólo conocida por este refrán.―

2 Viterbo, s. v. almocaria y almoqueire, cita al parecer los mismos docs., fechándolos en 1179. Pero, como de costumbre, sus formas están alteradas por malas lecturas (almoqueire, almoqueves, almocaria y también almocavaria). Es preferible atenerse a las citadas por CortesƟo de la buena edición dada en los PMH. Almoqueire podría también salir de almoqué(v)ere.