ALCANZAR, de alcalçar, alteración del antiguo acalçar, y éste, por cambio de prefijo, del lat. vg. *INCALCIAREpisar los talones, perseguir de cerca’ derivado de CALX, -CIS, ‘talón’.

1.ª doc.: acalzar, 1129; alcançar, 1135.

La etimología correcta de alcanzar se debe, en lo esencial, a Cuervo, Dicc. I, 316-24; la confirmaron M. P., Cid, 447, y Man. de Gram. Hist., § 68.2, y C. Michaëlis, RL XIII, 300-1. *INCALCIARE ha dejado descendientes en los demás romances: it. incalzare, fr. ant. enchaucier, oc. ant. y cat. encalçar, todos en el sentido de ‘perseguir, acosar’; se halla también encalçar en portugués antiguo y en textos leoneses (Alex.) y aragoneses o riojanos (Berceo, Cronicón Villarense, Fueros de Tilander y los citados por Tailhan, Rom. IX, 294-5) de los SS. XII y XIII. De acalçar reunió ejemplos Tailhan, y es frecuente en las Cantigas de Alfonso el Sabio («mas un foi-o acalçando con ssa azc?a monteira») (213.74; 142.16, 175.28, etc.). En cuanto a la forma del castellano y del portugués modernos alcanzar (-çar), suele explicarse como metátesis de un *ancalçar, resultado del cruce de acalçar con encalçar. Es muy posible que esta doctrina sea exacta1. Es sorprendente, con todo, que el lenguaje antiguo admitiera esta alteración del prefijo en- cuando justamente estaba reemplazando por en- y es- los pocos casos de an- y as-originario (entenado, encara, esconder, escuchar, etc.), y como ni *ancalçar está documentado ni encalçar, que yo sepa, aparece en textos de Castilla, será preferible adoptar la variante de C. Michaëlis: por intrusión del prefijo árabe al-, como en alborotar, almendra, almena y análogos, se dijo primero alcalçar, documentado en el Graal portugués, y luego por disimilación alcanzar o alcazar (alcaz en el Cid)2.

Semánticamente es fácil comprender cómo ‘perseguir de cerca’ se convirtió en ‘llegar a juntarse con el que va delante, alcanzar’ y sus variantes modernas. Por lo demás la ac. interromance ‘perseguir’ se halla todavía en el S. XIII: Cuervo da ejs. de Berceo, Alex. y Fn. Gonz., y en Aragón encalçar es ‘perseguir’ por lo menos hasta princ. S. XIV (Tilander, § 86.1); en el Cronicón Villarense, que también conoce esta ac. (BRAE VI, 206), evolucionó hasta ‘expulsar’ («Domicianus encalçó todos los judíos de su tierra e los embió por mar»: en la misma página y en la 202). Para las variedades modernas derivadas de la idea general de ‘llegar a juntarse con alguien’, puede verse Cuervo y el DHist. En América se han desarrollado algunas, que son nuevas, aunque no carecen de antecedentes europeos: ‘tender, ofrecer, hacer llegar’, muy corriente en la Argentina (le alcanzó un pedazo de carne, Quiroga, Raza Sufrida, 169, etc)3; ‘llegar (a hacer algo)’, como verbo modal («son grandes; los que usted vido ayer no alcanzan a ser más que retazos», Guiraldes, D. S. Sombra, 196)4.

DERIV.

Alcanzado: nótense las acs. ‘falto, necesitado’ y ‘empeñado por deudas’ (DHist.), de donde ‘extenuado’ («decidme primero cómo ha ido en el camino, que vendréis cansado y alcanzado también», Tirso, Burlador, I, 713). Alcanzadura ‘lesión que se hace el caballo golpeándose el talón de las manos con los pies’ [1564; port. encalçadura, en 1318, C. Michaëlis, l. c.]. Alcance [3r. cuarto S. XIII, Fn. Gonz.; 1.ª Crón. Gral. 21b52; -nço ibid. 395a38]. Es notable el uso prepositivo alcance de o a en algún texto gallegoportugués con el sentido de ‘cerca de’: «perderon-se na batalha alcance de 20.000 turcos» escribía en el S. XVI Diogo do Couto (Moraes); Sarmiento (CaG. 75v) escribía en castellano «el monte Rebon y el Río Tibio podrá ser alcance al Soto de Tibo».

1 Hoy el vulgarismo ancalzar se oye en algunos puntos de la Argentina (Draghi, Canc. Cuyano, p. 426), y quizá en otras partes, pero claro que es alteración moderna de alcanzar, comp. el vulgar canzolcillos.―

2 Ya en 1601 un escritor granadino considera que acança es propio de Castilla frente a alcança de Andalucía (BRAE XXXIV, 370). Aquella forma aparece también en Santa Teresa, de Ávila, en cuyo texto no debe enmendarse, como se ha hecho en la ed. reciente (V. la reseña de la NRFH). En el Sur de Salamanca y en ast. se dice hoy acanzar (Espinosa, Arc. Dial., 25 ; V), forma que admite varias explicaciones. La más probable me parece que sea el antiguo acalçar influído por la forma literaria, como ha ocurrido en percanzar o percalzar de percazar. No sé a qué otro cruce se debe la variante ast. algamar (V, R).―

3 Es ambiguo el pasaje de G. de Alfarache, «no trujo huésped bocado bueno a casa que no me alcanzase parte, ni ella (= mi suegra) lo pudo haber que no me lo comprase» (Cl. C. V, 58.9). El sujeto puede ser la suegra o la parte, en este caso tendríamos la ac. general ‘tocar (en parte)’. En imperativo (alcánzame eso) creo que es de uso general.―

4 Algo de esto se ha dicho y se dice en todas partes, desde el Siglo de Oro: «los criados ni su ama misma le alcanzaron a conocer aquel secreto» (G. de Alfarache, Cl. C. V, 113.14; otros en DHist. 15 y en Cuervo, 7d). Lo único nuevo en la Argentina es la pérdida total del énfasis, de suerte que no alcanzar ya no es ‘no tener capacidad bastante para algo’, sino un mero equivalente de la negación. Sin carácter modal, en el uso vulgar, alcanzar ha llegado allí a desterrar a bastar; no se dice nunca ¿bastará o habrá bastante aceite?, sino ¿alcanzará el aceite?