ACUDIR, sacado, con cambio de prefijo, del antiguo recudir ‘resurtir al paraje de donde se salió’, ‘responder’, ‘recurrir (a alguien)’, ‘concurrir (a un lugar)’, y éste del lat. RECŬTĔRErechazar’, ‘hacer resurtir’, derivado de QUATĔRE ‘sacudir’.

1.ª doc.: 1330 (J. Manuel, Libro de los Estados; acodir en las Memorias de Fernando IV, por la misma época: DHist.).

Es básico para la historia de acudir y recudir el trabajo de Y. Malkiel, Hisp. R. XIV, 104-125 y 137-149. Ya Cuervo, Dicc. I, 167-171, había probado que acudir no procedió de un étimo latino, sino que fué modificación del antiguo recudir, Malkiel confirmó esta doctrina, pero rectificándola en el sentido de que acudir no se creó como antónimo de recudir ‘resurtir’, ‘recurrir’, sino como mera variante de éste, del cual heredó al principio todos los significados, variante debida a la repugnancia del castellano por el empleo del prefijo re- con el valor algo excepcional que en recudir (junto a sus congéneres percudir, sacudir) tenia este prefijo, diferente del ordinario de repetición o retroceso. Es visible que recudir, muy frecuente en los SS. XII [Cid] y XIII, empieza a perder terreno en el XIV, cuando nace acudir; éste es raro aún en el S. XIV (sólo otro ej., en Cuervo) y no empieza a ser bien corriente hasta el comienzo del XV, al cual pertenecen las últimas autoridades de recudir1. Para el detalle en la evolución semántica de ambos verbos debe verse el estudio de Malkiel. No queda claro en qué forma entiende éste (pp. 110-112) que recudir heredó los significados de repercutere y de excutere; para explicar el gran desarrollo semántico de la palabra castellana frente al escaso empleo de su étimo latino, antes que admitir que estos dos verbos latinos sufrieron un cambio de prefijo, me parece preferible creer con Nobiling, ASNSL CXXIV, 334, que recutere invadió los dominios semánticos de recurrĕre ‘recurrir’, gracias a la coincidencia fonética de los participios de ambos verbos recussus y recursus, confundidos en romance. Fuera del castellano, sólo se ha conservado RECUTERE en port. ant. recudir ‘resultar’, ‘volver’, ‘huir’; es raro en catalán (un ej. en Eiximenis, fin S. XIV, ‘reverberar [la luz]’, hoy regodir ‘lanzar’, ‘hacer botar’ en Ribagorza: Spitzer, Lexik. a. d. K., 120). En cuanto a acudir, no parece ser genuino más que en español y portugués, pues el cat. acudir ‘recurrir’, ‘ocurrir’, hoy bastante arraigado, es castellanismo temprano (ejs. roselloneses de 1564 y 1570, en Ruscino I, 299; uno barcelonés de 1601, en Moliné, Consolat, 321; pero ninguno en la Edad Media), y el it. accudire ‘atender’ ‘asistir’ ‘ayudar’ llegó de España en el S. XVI y hoy todavía no es de uso popular (Petrocchi)2.

1 H. 1405 en la Crónica de Enrique III por López de Ayala; Villasandino; uno del Canc. Cast. del S. XV p. p. Foulché Delbosc y citado por Cej., Voc. Posteriormente aparece en Nebr., y APal., 400b, lo emplea en una de sus definiciones (quatro vías que recuden a una misma parte), pero su aparición en dicc. de los SS. XVI y XVII ya no prueba que el vocablo fuese vivo, a no ser en algún empleo especial como recudir con la renta ‘pagarla’, y en sus derivados recudimiento ‘poder para cobrar las rentas’ y de recudia ‘de rebote, de rechazo’, que siguen usándose en toda la Edad de Oro. Hoy sobrevive sólo en Santander y Asturias, en el sentido bastante especial de ‘escurrirse la humedad de algo’, que quizá se resiente del encuentro fonético entre excursus, participio de excurrere ‘escurrir’ y excussus, participio de excutere, hermano de recutere.―

2 Por un caso curioso acudir significa hoy ‘atacar a golpes’ en Catamarca, Argentina (lo acudía a puntazos y hachazos: Moya, Romancero, I, 463), acercándose al punto de partida semántico de quatere ‘sacudir’ Véanse ejs. antiguos parecidos en Malkiel, p. 139, pero será una coincidencia.