ACUDIR, sacado, con cambio de prefijo, del antiguo recudir ‘resurtir al paraje de donde se salió’, ‘responder’, ‘recurrir (a alguien)’, ‘concurrir (a un lugar)’, y éste del lat. RECŬTĔRE ‘rechazar’, ‘hacer resurtir’, derivado de QUATĔRE ‘sacudir’.
1.ª doc.: 1330 (J. Manuel, Libro de los Estados; acodir en las Memorias de Fernando IV, por la misma época: DHist.).
1 H. 1405 en la Crónica de Enrique III por López de Ayala; Villasandino; uno del Canc. Cast. del S. XV p. p. Foulché Delbosc y citado por Cej., Voc. Posteriormente aparece en Nebr., y APal., 400b, lo emplea en una de sus definiciones (quatro vías que recuden a una misma parte), pero su aparición en dicc. de los SS. XVI y XVII ya no prueba que el vocablo fuese vivo, a no ser en algún empleo especial como recudir con la renta ‘pagarla’, y en sus derivados recudimiento ‘poder para cobrar las rentas’ y de recudia ‘de rebote, de rechazo’, que siguen usándose en toda la Edad de Oro. Hoy sobrevive sólo en Santander y Asturias, en el sentido bastante especial de ‘escurrirse la humedad de algo’, que quizá se resiente del encuentro fonético entre excursus, participio de excurrere ‘escurrir’ y excussus, participio de excutere, hermano de recutere.― ↩
2 Por un caso curioso acudir significa hoy ‘atacar a golpes’ en Catamarca, Argentina (lo acudía a puntazos y hachazos: Moya, Romancero, I, 463), acercándose al punto de partida semántico de quatere ‘sacudir’ Véanse ejs. antiguos parecidos en Malkiel, p. 139, pero será una coincidencia. ↩