ABUBILLA, del lat. UPUPA íd., con agregación del sufijo diminutivo -illa.

1.ª doc.: h. 1400 (Glos. del Escorial)1.

La cantidad de las dos uu de upupa no está bien asegurada en latín, y en romance el vocalismo presenta vacilaciones, de acuerdo con el carácter onomatopéyico del vocablo. Del mismo origen que el castellano son el gall.2 y trasm. bubela, port. de Miranda boubela, mirandés boubiella (RL I,205-6; XXXI, 155; Leite de V., Philol. Mirand. II,49); el port. poupa puede ser derivado regresivo de los anteriores, o formación onomatopéyica independiente, como parecen serlo el cat. puput f., magrebí šubûb (Dozy, Suppl. I, 718), mozár. bubúpa (R. Martí, 638). Este último, sin embargo, continuará en parte una forma *upúpa tomada por el lat. UPUPA en mozárabe (habuba S. XIII Bibl. Med. Rom. I-j-8, Lev. 11.18), y de la cual viene también el and. japupa (AV), donde hay aglutinación de parte del articulo plural (lah apúpah). Más detalles sobre variantes dialectales y la evolución fonética en G. de Diego, BRAE VI, 747.Variantes dialectales, diversamente alteradas, en GdDD 6983-4.

1 Como en Glos. Esc. y APal. se escribe habubilla (aunque en este autor abunda la hache muda, habita, harena, heredad, hereje, etc.), es posible que en este caso la h sea aspirada, de origen onomatopéyico, ya que se repite en tres fuentes medievales; y no se puede pasar por alto tampoco el testimonio del fr. huppe y el del and. japupa.―

2 Añádanse a las formas citadas el gall. poupa, empleado hacia Tuy, y bubela empleado en otras partes, seg. Sarm. CaG. 182r y p. 239.