ABOBRA, ‘especie de calabaza’, del hispano-latino AP֊PĔRIS íd.

1.ª doc.: falta aún Acad. 1884.

El vocablo latino sólo se halla en las Etimologías de San Isidoro (XVII, x, 16, en la forma plural apoperes1, comp. cucumeres anteriormente) y en el glosario latino-árabe del S. XI. No hay duda de que era palabra indígena de la Península Ibérica. Bobra, abobrella, abobriella, bobrilla, bobrella se hallan en varias fuentes mozárabes de los SS. X-XIII, con referencia a Córdoba y al mozárabe oriental. M. P., Oríg. 409. La forma buebra de Abenalŷazzar prueba que la o tónica era breve. Abobra en realidad no es palabra castellana, como se ve por la o no diptongada, quizá la sacara la Acad. de las notas de Sarmiento sobre la Flora gallega, en las que Colmeiro halló esta forma. El P. Sobreira describe el gall. abobra «especie de calabaza grande, panza oblonga...» (DAcGa.) localizándolo en Lobios: quizá no el Lobios de Negreira sino el de Monforte de Lemos; en todo caso no está muy lejos de éste el pueblo de Boborás (15 km. al NO. de Orense), nombre que comprueba el viejo arraigo local en el Sur de Galicia, pues viene del colectivo *Boborales. Cf. prus. ant. aboros = b. alem. rofe (‘parte de un edificio rústico tapado por algo, seguramente un depósito tapado o la tapadera de un depósito en los establos o corral’), Glos. de Elbing 228; lit. ãbrė = rs. boljšoe koryto (o sea, ‘artesa o cuba grande’), ãbrinas ‘vasija de madera para la mantequilla’, lo cual se acerca ya bastante a una calabaza o colodra para líquidos. Reconozco que es incierto que abobra se relacione con esas voces bálticas, en calidad de supervivencia sorotáptica, pues ni siquiera está bien averiguado que las palabras lituanas tengan el mismo origen que la prusiana.

Y sin embargo, lo evidente es que la forma APOP֊RA ~ APOPĔRES tiene marcado aire indoeuropeo y no lo desmiente el área de la palabra, más luso-leonesa que central, y desde luego no aragonesa. Una base como APO-PER- nos recuerda el ubicuo prefijo ieur. APO- y la raíz PER- / POR- del gr. πειράω o de πορεύομαι, lat. portare, germ. faran; combinada con dicho prefijo la tenemos en el lat. a(b)sportare y gr. ęποπορεύομαι ‘llevarse, transportar (desde)’. No es que parezca imposible relacionar esta idea con la de una calabacilla. Pero sería más sugerente pensar en APOBHERĶ (combinación verbal de extensión general en la familia indoeuropea), lo cual tendría la ventaja de conducir a un enlace con el báltico aboros ~ ãbrė, puesto que es propiedad conocida de los preverbios indoeuropeos la posible apócope ante una raíz de consonante inicial análoga a la del preverbio: ıποινα < ęπó-ποινα, ęμưορεύς, gr. itálico amphora < ęμưι-ưορεύς, que designa un recipiente comparable a una calabacilla empleada para traer agua del rio o vino del tonel, y ésta es natural se llamara apo-bhora; ποƌαπóνιπτρον > ποƌάνιπτρον2, hisp. célt. AM-BOSTA, de donde el castellano almuerza, cat. almosta, ambosta (< AMBIBOSTA); en el prus. ant. aboros tendríamos pues la forma apocopada, junto a la hispánica APOPERES, que pudo resultar de una asimilación aliterante, en su forma sorotáptica *apopheres: el mismo dualismo, y sin haplología, en el micenio a-pi-po-re-we (= ęμưιưορŲΦες junto a a-po-re-we (= αμưορŲΦες).

1 La forma apopores figura en las ediciones modernas del santo, mas no en los manuscritos (ed. Lindsay); también en el Liber Glossarum, que contiene glosas procedentes de San Isidoro. No tiene razón Sofer, 118, al decir que la ´o , a pesar de eso, está asegurada por las formas romances, refiriéndose al port. abóbora, pues en este idioma existe también abóbara y abobra (Colmeiro, II, 416), y sabiendo la inestabilidad del vocalismo átono lusitano debemos admitir que abóbora es forma asimilada. La variante seudo-isidoriana con o estará precisamente influída por esta variante portuguesa. Pero lo que se debiera asegurar ante todo es si la forma con o, apopores está ya en las Etimologías del santo y no sólo en los datos isidorianos del Liber Glossarum, porque de otro modo nos quedará la duda de si puede ser una forma con fonética mozárabe, que estuviera para con el lat. pepo en relación paralela a la de hababaura (> amapola, ababol) por el lat. paver.―

2 Para más ejemplos y para el modo de aplicación de esta norma en griego, vid. Lejeune, Phon. Mycén. Gr. Anc. § 334, y los casos de «hapaxepia» reunidos por Grammont, Traité de Phonétique, 336-337, 331-333.